Problema y Solución

Autora: Marisol Palapa Cruz León, Guanajuato, México.

     Un oso polar aferrándose a un pedazo de hielo, lo que queda de su hogar, un pedazo de hielo que le dé esperanzas de supervivencia. Esta es la metáfora que quise representar en mi fotografía: la esperanza de vida para muchas especies y para nosotros mismos es algo que está en nuestras manos. Realizar acciones sencillas como utilizar focos ahorradores representa una señal de vida, de esperanza, de mirar hacia el futuro, de preocuparnos y ocuparnos en cuidar el Planeta.

    El título lo dice: “problema y solución”, ya que considero que pensar las cosas de la forma más sencilla ayuda a la comprensión de las ideas. Pensar que la acción de cambiar un foco convencional por una lámpara ahorradora puede darle esperanzas de supervivencia a una criatura como un oso polar, es algo que motiva, y es una decisión fácil de tomar. Es como ponerle rostro a un problema y plantear soluciones que están en nuestras manos, ya que muchas veces, sumergidos en la comodidad, la desidia o la desinformación, terminamos desarrollando actitudes que forman parte del problema del calentamiento global.

   Acciones cotidianas como aprovechar al máximo la luz natural, desconectar nuestros aparatos eléctricos, cerrar la regadera mientras nos enjabonamos, separar los residuos que generamos, etc., son cosas sencillas que no requieren gran esfuerzo. Si nos detenemos a pensar, llegaremos a la conclusión de que no cuesta mucho y vale la pena hacerlo, el problema es que pocas veces nos detenemos a pensar en lo que hacemos por el ritmo acelerado en el que vivimos.

     Realizar acciones de cuidado hacia el medio ambiente para que los osos polares no pierdan su hábitat es solo una forma de ejemplificarlo; pues si seguimos por esa línea de razonamiento, nos daremos cuenta de otras situaciones: nosotros mismos sufriendo por temperaturas extremas, sequias o lluvias intensas. En realidad lo que está en juego es la vida de todos los seres que habitamos el Planeta.

     No nos detengamos aquí, sigamos pensando y veremos que vale la pena informarse más, entonces sabremos que hay más cosas que podemos hacer, como practicar un consumo responsable, elegir productos que sean amigables con el ambiente, exigir políticas públicas que contribuyan a detener el problema del calentamiento global, y apoyar a las organizaciones de la sociedad civil que luchan por hacer real la esperanza de un futuro mejor para el Planeta Tierra. 

Artículo extraido de la Gaceta NaturaLeeza N°22, publicada cuatrimestralmente por la Universidad de Guanajuato.

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